Para que se produzca una transformación como esta, hay que esmerarse en discernir lo esencial de todo lo que lo esté ocultando o entorpeciendo. Esta vivienda es un claro ejemplo. La constante atención a lo esencial y hasta el último detalle, han conseguido hacer de su interior un espacio renovado, en el que la luz entra hasta cada rincón con mucha más energía y vitalidad que antes.