El diseño de esta vivienda se define por el contraste de sus materiales. La fachada principal se ha revestido en piedra, mientras que para los laterales se ha empleado un revoco blanco.
La madera de la cubierta y la carpintería en tono oscuro unifican el conjunto. El resultado es una construcción que, mediante la combinación de texturas, se integra de forma armónica en el entorno de la calle.